La Fundación Centro de Supercomputación de Castilla y León (SCAYLE), miembro de DIGIS3, y el Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (INCIBE) han estrechado lazos para impulsar su cooperación de cara a lograr que los últimos avances en ciberseguridad, que hasta hace unos años eran casi una exclusividad de las empresas que operaban en los sectores más tecnológicos, lleguen a todos los usuarios y, a su vez, ayuden a incrementar la competitividad de las empresas, independientemente del ámbito en el que desarrollen su actividad.
Así se han comprometido tanto la consejera de Movilidad y Transformación Digital y presidenta de SCAYLE, María González Corral, como el director del INCIBE, Félix Barrio, durante la visita que la primera ha realizado en la mañana de hoy a las instalaciones del instituto, ubicado, al igual que SCAYLE, en la capital leonesa.
Durante ese encuentro, ambos han aprovechado para repasar los proyectos en los que están trabajando conjuntamente, así como poner en común las tendencias que se están produciendo, “dentro de un ámbito de vital importancia en la sociedad actual debido a su creciente dependencia de la tecnología y la información digital”, ha apuntado González Corral, que ha estado acompañada de la directora de SCAYLE, Hilde Pérez.
Encuentro SCAYLE e INCIBE. Fuente: Junta de Castilla y León
En este sentido, la consejera ha recalcado que es indispensable que los ciudadanos “caigan en la cuenta de que la seguridad de nuestros datos y sistemas es crucial “ya que estamos en un mundo donde la mayoría de nuestras actividades cotidianas se realizan en línea, y que, “de lo contrario, estamos expuestos a una amplia gama de amenazas”.
Precisamente luchar contra esas amenazas, que se consuman en los denominados ciberataques, “los cuales están registrando un importante aumento en todas sus formas”, ha apuntado González Corral, es el objetivo prioritario de la labor que tanto, nuestro socio SCAYLE, como INCIBE están llevando a cabo en estos momentos, “como es el desarrollo de proyectos totalmente innovadores relacionados con la comunicación y la computación cuántica, estas áreas tienen el potencial de revolucionar la forma en que interactuamos con la información y la tecnología en el futuro, redundando en mejores servicios a ciudadanos y empresas”.
Encuentro SCAYLE e INCIBE. Fuente: Junta de Castilla y León
Proyectos conjuntos
Los principales proyectos conjuntos en los que están trabajando SCAYLE e INCIBE en estos momentos son los denominados CINDERELLA y HOT, que cuentan con financiación de los Fondos Europeos Next Generation.
En el primer caso, CINDERELLA lo que persigue es la creación de un centro de distribución de claves cuánticas a través de fibra óptica y el desarrollo de un sistema criptográfico en la nube resistente a ataques con computadores cuánticos, “que permita que las empresas que opten por utilizar este servicio cuenten con mecanismos seguros de transferencia de datos confidenciales”, ha comentado la consejera. Este proyecto, que se encuentra en plena fase de desarrollo, cuenta con un plazo de ejecución de 34 meses y prevé su finalización para mayo del año 2026.
En el segundo, HOT busca el establecimiento de un sistema automático que preserve el anonimato en las modificaciones o borrados de los datos existentes en los principales proveedores de servicios en la nube (Microsoft Azure, Amazon Web Services, Google Cloud y Oracle Cloud) mediante el despliegue, bajo demanda, de redes de entornos simulados, conocidos como “señuelos”. El plazo de ejecución del proyecto, ya en marcha, también prevé su finalización en mayo de 2026.
“La ciberseguridad es un elemento básico en el desarrollo digital porque sobre ella se sustentan todas las tecnologías avanzadas (Inteligencia Artificial, gemelos digitales, robótica, machine learning, etc.). En consecuencia, a medida que se incrementan los avances tecnológicos, se hace más imprescindible contar con una ciberseguridad sólida y es en eso en lo que tanto la Junta de Castilla y León, a través de SCAYLE, como el Gobierno, gracias a INCIBE, estamos trabajando”, concluyó María González Corral.